Sin embargo, el mexicano no se fía y cree que en esta situación, el conjunto de Marcelino puede ser más peligroso. "Los equipos que llevamos varias semanas sin ganar ponemos más atención en los detalles y eso nos hace a los dos equipos más duros, más comprometidos y más sólidos", ha explicado.
Aguirre y sus hombres ya han hecho cuentas y saben perfectamente lo que quieren antes de que termine el año. "Hay que sumar 6 ó 7 puntos más antes del parón navideño y cerrar la primera vuelta con 21 ó 22 para tener tranquilidad".
Sobre su futuro, el azteca reconoció que, pese a la situación del Real Zaragoza, "yo me siento respaldadísimo. Sé que los entrenadores somos hijos de los resultados y mi cabeza está en el equipo. Quedan muchos partidos y estoy trabajando para acertar y mejorar para salir de este problema", ha comentado.
Por último, esta semana Aguirre ha trabajado minuciosamente la estrategia, sobre todo la defensiva, para no seguir encajando goles a balón parado. "Me preocupa mucho y lo hemos trabajado, porque en jugadas aisladas se nos escapan muchos puntos. Esas acciones echan a perder el trabajo de 89 minutos y no puede ser", ha recordado.
Aguirre ha facilitado una convocatoria en la que las novedades han sido la presencia del portero del filial Kilian, como sustituto de los lesionados Leo Franco y Pablo Alcolea, y el regreso de Pinter. Se quedaron fuera Antonio Tomás, al que el mexicano aún no ve en plenas condiciones, y Edu Oriol, por decisión técnica. Además, el técnico desveló de nuevo el once que presentará ante el Sevilla y estará formado por Roberto, Juárez, Lanzaro, Mateos, Paredes, Ponzio, Meira, Lafita, Juan Carlos, Luis García y Postiga.
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