Liverpool | 1 |
---|---|
Manchester City | 1 |
El planteamiento realizado por Dalglish funcionó a la perfección hasta que que su equipo llegaba a la portería del City. Allí, Hart desbarató el meticuloso y efectivo plan de los 'reds'. Ahogó el Liverpool la creación del City y cedió la iniciativa con inteligencia a su rival. Ahí se siente cómodo el conjunto 'red', disciplinado y coordinado en sus movimientos defensivos y más que satisfecho con apostar a un rápido contragolpe.
La repentina muerte de Gary Speed sacó a Bellamy de la convocatoria. Nadie sabe si Dalglish hubiera repetido el equipo de Stamford Bridge de haber contado con el galés. Es imposible predecir si, con el rápido delantero, el técnico del Liverpool no hubiera acumulado fuerzas en la medular con Henderson, Leiva, Adam y Kuyt. La única certeza es que esa variante fue el sustento del equipo 'red' y el azote del líder.

Pese a todo, los 'citizens' se adelantaron a balón parado gracias a Kompany, arrollador en el juego aéreo. Pudo suponer un giro de rumbo el tanto del City pero el Liverpool tuvo la fortuna de equilibrar el choque muy pronto. En un error grave de Lescott al despejar un tiro inofensivo de Adam encontró el respiro el conjunto 'red'.
Balotelli se convierte en víctima
El escenario volvió a montarse pieza por pieza y se mantuvo hasta casi el final del partido. El dominio estéril y apacible del City junto al orden y la paciencia del Liverpool. Hasta que entró Balotelli. El controvertido delantero no estuvo ni 20 minutos sobre el terreno de juego. Esta vez, su fama y la interpretación de Skrtel le echaron del partido. Ya había crecido el Liverpool por entonces y Hart había iniciado su recital, pero la inferioridad del City dejó, indudablemente, al líder contra las cuerdas.
Dalglish dio entrada a Carroll y los 'reds' optaron por un estilo más vertical, acuciados por la falta de minutos y la presencia del fornido punta inglés. El acoso fue constante pero el City aún pudo enmudecer Anfield si Silva hubiera acertado en un mano a mano con Reina. Poco después, Hart aumentó su figura con una mágica intervención tras un cabezazo de Carroll, ya con el tiempo cumplido.
El punto, que duda cabe, sabe a gloria al equipo de Mancini, más líder de la Premier y con otra jornada tachada en el calendario. Anfield nunca es fácil y menos con este Liverpool en evidente crecimiento. La única duda es hasta dónde llegara el tope de los 'reds' esta temporada. Porque no todo es dar la cara ante los grandes.
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