jueves, enero 27

'Gol fantasma' del Sevilla al Real Madrid: ¿Entró o no entró el balón?

Madrid.- Agonizaba la primera parte del Sevilla-Real Madrid (0-1) sin saber que la gran polémica de la noche estaba a punto de tener lugar. Luis Fabiano se coló en el área de Iker Casillas, le regateó y lanzó mordido un balón con dirección a la portería del meta de Móstoles. Raúl Albiol se coló en la jugada, cayó al suelo y logró sacar en la línea de gol el disparo del ariete brasileño. En ese momento nació la duda: ¿Entró o no entró en la portería la pelota?
Para el juez de línea que cubría la jugada no entró. Los jugadores del Sevilla opinan lo contrario y así se lo hicieron saber al árbitro Undiano Mallenco, con quien montaron en cólera tras acabar el primer tiempo. Los diligentes operadores de cámara de Canal + tampoco solucionan la duda. Las decenas de imágenes captadas muestran como el zaguero 'blanco' se lanza al verde, alcanza junto al poste el balón y evita que éste entre con claridad.
Hay tomas que parecen mostrar que el esférico sí traspasa la línea por completo. Otras no son tan claras y dan lugar un debate donde la clave es esclarecer si la pelota rebasa totalmente la raya de cal.
Lo que sí es correcto es el comportamiento del linier, quien en caso de duda no debe conceder el tanto. Así lo dice la regla 10: "Se marca un gol cuando el balón cruza completamente la línea de meta entre los postes verticales y por debajo del travesaño de la meta, siempre y cuando el equipo que anota no haya infringido las reglas del juego previamente". El línea entiende que el esférico no rebasa por completo el límite vertical marcado por el palo y por tanto no decreta gol.
El 'gol fantasma' del Luis Fabiano fue la guinda de un partido de semifinales de Copa del Rey que empezó, se jugó y terminó repleto de polémica. Los ánimos ya estaban caldeados tras el polémico vídeo que emitió el Sevilla días antes del partido y la tensión se palpó sobre el césped, donde el Madrid fue superior gracias a un juego ordenado y muy serio en defensa y en el medio campo. Arriba, un zarpazo del 'gato' Benzema inclinó la eliminatoria para los de José Mourinho, que ya se ven en la final.
Sin embargo, lo peor estaba por llegar: nada más concluir el partido, un par de energúmenos lanzaron sendas botellas a Iker Casillas cuando éste se retiraba al vestuario. El guardameta yacía en el piso cuando los recogepelotas del Sevilla se apresuraban en retirar del césped el objeto de la agresión, que no fue tan grave como pudo llegar a ser.
 

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